Red Velvet Magnolia Cupcakes










Red Velvet Magnolia Cupcakes…o, un mordisco de cielo en NY.
En post anteriores les acerque las recetas de los cupcakes de chocolate y de vainilla de Magnolia Bakery, hoy les comparto los Red Velvet Magnolia Cupcakes!
Son irresistibles, suaves, húmedos y como su nombre lo indica…aterciopelados.
El complemento ideal para estos pasteles, frosting de queso y dulce de zarzamora.
No pueden perderse de hacerlos, porque además de ricos son súper fáciles. La mejor manera de mimar o mimarse, en un día de lluvia como éste.
Las flores, de pasta de azúcar. Los colores…una combinación de rosa viejo, violeta profundo y lila. El toque romántico perfecto para estas delicias!

En poco tiempo, para las fanáticas de la deco de pasteles, nuevo workshop:
"basicos con pasta de azúcar"…quien se tienta?
Si te interesa, podes pedir mas información aquí.

Linda semana para todos!
Vir


Red Velvet Magnolia Cupcakes
(las medidas son en base a tazas de medir de pastelería y mi experiencia con esta receta)

1 ½ taza de harina 0000
2 cucharadas de cacao amargo de buena calidad
½ taza de manteca pomada
1 ¼ taza de azúcar rubio
2 huevos chicos a temperatura ambiente
½ cucharadita de colorante rojo en pasta
1 cucharadita de extracto de vainilla
½ cucharadita de sal
½ taza de buttermilk
1 cucharadita de vinagre de alcohol
1 cucharadita de bicarbonato de sodio


Precalentar el horno a 180 grados y preparar dos placas para cupcakes con pirotines.
En un bol mediano cernir la harina y el cacao, reservar.
En otro bol, batir la manteca con el azúcar hasta obtener una crema pálida.
Incorporar los huevos de 1 por vez.
Diluir el colorante en la vainilla y agregar a la preparación.
Aparte, incorporar la sal al buttermilk.
Agregar la harina a la mezcla en tres veces intercalando con el buttermilk, comenzando y terminando con la harina.
Por último, mezclar el vinagre con el bicarbonato y agregarlo de inmediato a la preparación.
Llenar los pirotines hasta ¾ partes de su capacidad y llevar al horno durante 15 a 20 minutos.
Retirar y dejar enfriar sobre rejilla.
Ahuecar y rellenar con dulce de zarzamora y frosting de queso.
Por último decorar con pasta de azúcar.