Pan de Malta y Semillas


Desde que fui mamá y estoy en periodo de lactancia, he escuchado los consejos más variados y extraños para favorecer la producción de leche. Sin mencionar todo lo que escuche durante mi embarazo. Me han dicho que tomara mucho mate cocido, o consumiera muchísima malta o … el más extraño fue, que durmiera con una barba de hinojo debajo de cada axila…claro está que no lo hice, si todavía encima de los cambios que atraviesa la pareja con el primer hijo, me acuesto a dormir con dos hinojos verdes y velludos debajo de los brazos, no quisiera saber a dónde iría a parar mi matrimonio, por más que hayamos tenido una hija hermosa, estoy segura que mi marido saldría corriendo por mitad de la calle en medio de la noche.
Entonces, a demás de evitar este consejo, lo que sí hice y puedo dar fe de su excelente resultado, es tomar malta. Tanto mi marido como mi madre, se encargaron de llenar la heladera con cantidades industriales de esta bebida. No hay lugar para otra cosa en la heladera más que para malta, malta por tooodos lados, y por supuesto malta “Salta”.
No es tan popular como la cerveza, pero si la quieren probar asegúrense que este bien fría, de lo contrario no creo que les guste. Y es cero alcohol.


Con tanta abundancia de malta, se me ocurrió usarla para cocinar. Este lunes estaba preparando un pan muy fácil, que se hace con bicarbonato de sodio y polvo de hornear, no lleva tiempo de leudado y por lo tanto es muy rápido, se cocina en apenas 40 minutos. El medio liquido es suero de leche o buttermilk, ya les diré como prepararlo. Y decidí reemplazar una parte de este suero por Malta, así es como logre este pan de Malta. Es súper nutritivo, gustoso y de aspecto rustico. Ideal para un desayuno rico en fibras y semillas.
Por no llevar levadura, la miga resulta densa y poco alveolada, lo que la hace perfecta para cortar rebanadas finas. Me gusta comerlo con queso Philadelphia y miel, o a la tardecita, en rebanadas para unos sándwiches de jamón crudo, queso crema y pepinos, con un botellita de malta bien fría, claro está.. Recuerden que no dura muchos días y que le pueden agregar la variedad de semillas que más les gusten. Yo usé un mix que tengo preparado para comer en el desayuno con yogurt, sésamo, chía, girasol y amapola.




Pan de Malta y Semillas

250g de Harina Integral
250g de Harina 000
150g de Semillas (a gusto)
2 cucharadas de Bicarbonato de Sodio
1 cucharadita de Polvo de Hornear
¼ de cucharadita de Sal
2 cucharadas de Miel
250ml de Suero de Leche
150ml de Malta

En un tazón mezclar las harinas cernidas y todos los ingredientes secos, una vez terminado este paso hacer una hoyo en el centro y agregar los liquido con la ayuda de un cornet o espátula, mezclando todo rápidamente. Primero conviene incorporar el suero de leche y luego ir agregando la malta de apoco, si fuera necesario agregar harina para que no sea muy chirlo.
Volcar la preparación sobre una mesada y amasar durante pocos minutos, solo hasta formar un bollo prolijo. Colocar en molde de pan y salpicar con semillas para dar una mejor terminación.
Llevar a horno medio durante 40 minutos o hasta que se lo vea dorado en la parte superior.


Buttermilk o Suero de Leche

250ml de leche entera
2 cucharadas soperas de vinagre blanco o limón

En un tazón colocar la leche e incorporarle el vinagre o el limón, a mí en lo personal me gusta más como queda con vinagre. Revolver y dejarlo reposar de 10 a 20 minutos.
Al cabo de este tiempo tendrán como resultado un liquido de aspecto cuajado, esto es el suero de leche o buttermilk, revuélvanlo un poco y estará listo para usar.